Se dijo que nadie escribía mejor prosa que ella en inglés, que sus libros eran "como rayos láser punzantes" y que su pluma era "fría, concisa y distintiva".
Se dijo que nadie escribía mejor prosa que ella en inglés, que sus libros eran "como rayos láser punzantes" y que su pluma era "fría, concisa y distintiva".